También conocido como: antígeno HLA-B27, B27
Nombre sistemático: antígeno leucocitario humano B27
Aspectos generales
¿Por qué hacer el análisis?
Para saber si se expresa el antígeno leucocitario humano B27 (HLA-B27) en la superficie de las células y para evaluar el riesgo de que se padezca una enfermedad autoinmune relacionada con la presencia de HLA-B27.
¿Cuándo hacer el análisis?
Si se tienen síntomas de inflamación crónica como dolor o rigidez en las articulaciones e inflamación en algunas partes del cuerpo como la espalda (zona lumbar), la cadera, el cuello y el pecho, o una inflamación de los ojos que causa dolor (uveítis). Estos síntomas tienen especial importancia cuando aparecen en los varones alrededor de los 30 años.
¿Qué muestra se requiere?
La determinación se realiza a partir de una muestra de sangre venosa del brazo.
¿Es necesario algún tipo de preparación previa?
Para esta prueba no se necesita ninguna preparación especial.
¿Qué es lo que se analiza?
El HLA-B27 es una proteína específica conocida como antígeno leucocitario humano o HLA (por sus siglas en inglés) presente en la superficie de las células. También se emplea HLA-B27 para referirse al gen que codifica para esta proteína. La prueba del HLA-B27 determina la presencia o ausencia de la proteína en la superficie de los leucocitos.
Los antígenos leucocitarios humanos (HLA) constituyen un grupo de proteínas que ayudan al sistema inmunitario del organismo a reconocer sus propias células y a distinguirlas de las que no lo son. Cada individuo tiene una combinación de genes HLA que codifican para los diferentes antígenos presentes en la membrana de sus células. La presencia o ausencia de cada uno de estos antígenos crea una combinación propia de HLA en cada persona.
Se estima que el antígeno leucocitario humano HLA-B27 se encuentra en el 5-10% de la población. Las personas con HLA-B27 presentan mayor probabilidad de desarrollar enfermedades autoinmunes como la espondilitis anquilosante (EA), la artritis idiopática juvenil, la artritis reactiva (entre las cuales se incluye el Síndrome de Reiter) y la uveítis anterior aguda. El HLA-B27 también puede estar presente en las personas que padecen la enfermedad inflamatoria intestinal (EII) y en individuos con otros trastornos crónicos.
La espondilitis anquilosante (EA) y la artritis reactiva son enfermedades crónicas y progresivas, más frecuentes en hombres y que suelen aparecer alrededor de los 30 años. A menudo los primeros síntomas de estas enfermedades pasan desapercibidos y pueden pasar años hasta que se pueden ver los cambios degenerativos característicos de los huesos y articulaciones en las radiografías.
- La espondilitis anquilosante (EA): se caracteriza por dolor, inflamación y rigidez progresiva de la columna, el cuello y el tórax.
- La artritis reactiva: se caracteriza por una serie de síntomas que incluyen inflamación de las articulaciones, la uretra, los ojos y lesiones en la piel.
- La artritis reumatoide juvenil: es una forma de artritis que afecta a los niños.
- La uveítis anterior aguda: se asocia a la inflamación recurrente de ciertas estructuras en uno o ambos ojos.
Si bien el HLA-B27 no es la causa de estas enfermedades, existe una mayor prevalencia de este antígeno en los individuos que las padecen. Así, menos de un 10% de la población es positiva para el HLA-B27, sin embargo alrededor del 90% de las personas con espondilitis anquilosante (EA) presentan este antígeno.
Preguntas comunes
¿Cómo se utiliza?
La prueba del HLA-B27 se utiliza principalmente para confirmar la sospecha de un diagnóstico de espondilitis anquilosante (EA), artritis idiopática juvenil, artritis reactiva y algunos casos de uveítis anterior aguda.
La prueba para el HLA-B27 no es diagnóstica de ninguna enfermedad por ello no puede utilizarse para diagnosticar o descartar una enfermedad. Tiene utilidad en conjunto con los signos y síntomas del paciente y otras pruebas de laboratorio permitiendo así diagnosticar o descartar una serie de enfermedades autoinmunes.
Por lo tanto, la prueba del HLA-B27 se solicita junto con otras pruebas para diagnosticar y evaluar una serie de enfermedades caracterizadas por dolor articular crónico de tipo artrítico, rigidez e inflamación. Entre estas otras pruebas de laboratorio relacionadas con la inflamación destaca: el factor reumatoide (FR), la velocidad de sedimentación globular (VSG) y la proteína C reactiva (PCR). La determinación del HLA-B27 también puede solicitarse para evaluar los casos de uveítis recurrente no atribuible a otras causas.
¿Cuándo se solicita?
Esta prueba se solicita en las personas que tienen dolor e inflamación aguda o crónica en la espalda, el cuello, el pecho, los ojos o las articulaciones; cuando el médico sospecha una enfermedad autoinmune asociada a la presencia del HLA-B27 y, en algunos casos, en la evaluación de los de uveítis recurrente.
Por lo tanto, el HLA-B27 suele solicitarse ante la sospecha de una espondilitis anquilosante (EA) en fases iniciales, cuando los cambios característicos en la columna vertebral todavía no son detectables en las radiografías.
¿Qué significa el resultado?
Si el resultado de la prueba es positivo y la persona presenta síntomas como dolor articular crónico, inflamación o cambios óseos degenerativos (ya visibles en las radiografías), es muy probable que el individuo tenga una espondilitis anquilosante (EA), una artritis reactiva u otra enfermedad autoinmune asociada a la presencia del HLA-B27. La probabilidad es mayor si se trata de un hombre joven que empieza a tener síntomas antes de los 40 años.
Si el resultado de la prueba es negativo, significa que el marcador no está en la célula. Sin embargo, no puede descartarse la enfermedad ya que algunas personas pueden desarrollar estas enfermedades autoinmunes aunque no tengan el HLA-B27. De manera similar, el hecho de ser HLA-B27 positivo no implica que se vayan a desarrollar estas enfermedades.
La presencia o no de los antígenos HLA viene determinada genéticamente, su producción está controlada por genes transmitidos de padres a hijos. Si dos miembros de la misma familia son positivos para el HLA-B27 y uno de ellos desarrolla una enfermedad asociada al HLA-B27, el riesgo de que el otro miembro desarrolle una enfermedad similar está aumentado.
¿Hay algo más que debería saber?
A pesar de que las enfermedades asociadas al HLA-B27 son más frecuentes en los varones, las mujeres también pueden padecerlas; sin embargo, los signos y síntomas suelen ser más leves.
Con las nuevas pruebas genéticas es posible clasificar los antígenos HLA-B27 en diferentes subtipos. Hasta la actualidad se han descrito más de 105 subtipos distintos, como el HLA-B27*05 y el HLA-B27*02. Aún se desconoce cómo afecta cada uno de los subtipos a la posibilidad de desarrollar una enfermedad autoinmune.
¿Cuál es la causa de las enfermedades autoinmunes asociadas a HLA-B27?
La mayoría de las veces se desconoce la causa. Sin embargo, en algunas artritis reactivas se puede establecer una asociación entre el desarrollo de la enfermedad y una infección previa por determinados microorganismos como: Chlamydia, Campylobacter, Salmonella, Ureaplasma o Yersinia. Se cree que las similitudes entre el HLA-B27 y los antígenos presentes en la superficie de estos microorganismos podrían desencadena una reacción del sistema inmunitario que atacaría tanto al microorganismo como a sus propios tejidos, dando lugar a la enfermedad autoinmune una vez que la infección ya se ha resuelto.
¿Cuánto tardan los resultados del HLA-B27?
Depende del laboratorio que realice la prueba. Son necesarios equipos y personal especializados, por lo que no está disponible en todos los laboratorios. En la mayoría de los casos, la sangre se enviará a un laboratorio de referencia y el resultado puede tardar varios días en estar disponible.
¿Debería realizarse esta prueba a todo el mundo?
No se recomienda el cribado en la población general. Normalmente solamente se solicita la prueba en las las personas con síntomas. Un resultado positivo al HLA-B27 en una persona sin síntomas o sin antecedentes familiares de enfermedades asociadas al HLA-B27, no tiene ninguna relevancia clínica. No predice la probabilidad de que la persona acabe desarrollando una enfermedad autoinmune. Ocasionalmente, puede realizarse la prueba a un familiar de una persona con enfermedad autoinmune y positiva para el HLA-B27, aunque el resultado no contribuirá a predecir si el familiar del afectado desarrollará o no una enfermedad autoinmune.
Enlaces
Pruebas relacionadas:
Pruebas de histocompatibilidad (HLA)
Proteína C reactiva (PCR)
Velocidad de sedimentación globular (VSG)
Estados fisiológicos y enfermedades:
Espondilitis anquilosante (EA)
En otras webs:
Coordinadora Española de Asociaciones de Espondiloartritis (CEADE)
Coordinadora Nacional de Artritis (conartritis)
Sociedad Española de Reumatología (SER)
También conocido como: HSV-1, HSV-2, HHV1, HHV2, VHS, herpes oral, herpes labial, herpes genital
Nombre sistemático: virus del herpes simple tipo 1 y tipo 2
Aspectos generales
¿Por qué hacer el análisis?
Para hacer un cribado o un diagnóstico de la infección por el virus del herpes simple (VHS).