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También conocido como: cuerpos cetónicos, beta-hidroxibutirato, acetoacetato, acetona, ácido acetoacético, ácido beta-hidroxibutírico, cetonas en suero

Nombre sistemático: cetonas en sangre

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Aspectos generales

¿Por qué hacer el análisis?

Para determinar la cantidad de cetonas (cuerpos cetónicos, acetona, acetoacetato, beta-hidroxibutirato) presentes en la sangre y facilitar el diagnóstico de algunas patologías con riesgo vital, como la cetoacidosis diabética o la cetoacidosis alcohólica.

¿Cuándo hacer el análisis?

Cuando existen signos o síntomas asociados a cetoacidosis, como aumento de la diuresis, sed excesiva, deshidratación, aumento de la frecuencia cardíaca y respiratoria y disnea.

¿Qué muestra se requiere?

La determinación se realiza a partir de una muestra de sangre venosa del brazo o de una gota de sangre obtenida por punción en un dedo.

¿Es necesario algún tipo de preparación previa?

Para esta prueba no se necesita ninguna preparación especial.

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¿Qué es lo que se analiza?

Las cetonas o cuerpos cetónicos son subproductos del metabolismo de las grasas. Esta prueba mide la cantidad de cetonas en sangre.

Las cetonas se producen cuando no hay suficiente glucosa para satisfacer las necesidades energéticas del organismo o cuando la glucosa presente no se puede utilizar como combustible, porque no hay suficiente insulina. En estos casos, el organismo obtiene la energía a partir de las grasas. Al metabolizar las grasas, se acumulan en sangre unos subproductos conocidos como cuerpos cetónicos, dando lugar inicialmente a una cetosis que puede progresar a un tipo de acidosis metabólica denominada cetoacidosis. Este hallazgo es frecuente sobre todo en la diabetes tipo 1 mal controlada y puede constituir una urgencia médica.

La cetoacidosis diabética se asocia a un aumento brusco de la glucosa en sangre (hiperglucemia aguda) y una deficiencia grave de insulina asociados a una alteración del equilibrio ácido-base del organismo. El exceso de cetonas y de glucosa se liberan por la orina a través de los riñones, para intentar reducir su concentración en la sangre. Consecuentemente, se produce un aumento de la cantidad y frecuencia de la orina asociado a sensación de sed, deshidratación y pérdida de electrolitos. Otros signos o síntomas asociados con la cetoacidosis diabética son el aumento de la frecuencia respiratoria, la disnea, un olor afrutado del aliento, náuseas, vómitos, fatiga, confusión y en los casos graves se puede llegar al coma.

La cetosis y la cetoacidosis también pueden aparecer en situaciones de ayuno prolongado, alcoholismo o dietas ricas en grasa y pobres en carbohidratos (como las dietas “keto” o dietas cetogénicas). En ocasiones se provoca esta situación en los niños con epilepsia que tienen convulsiones frecuentes y no responden al tratamiento farmacológico.

Existen tres cuerpos cetónicos: acetoacetato, beta-hidroxibutirato y acetona.

• El acetoacetato: es el primero que se origina durante el metabolismo de las grasas.
• El beta-hidroxibutirato: se crea a partir del acetoacetato. Se trata del cuerpo cetónico predominante en los casos graves de cetoacidosis diabética.
• La acetona: es un producto que se forma espontáneamente a partir del acetoacetato.

Los diferentes métodos de medida de cetonas en sangre determinan uno o varios cuerpos cetónicos en la muestra, y por ello los resultados de distintos métodos no son intercambiables.

El análisis de sangre proporciona una determinación puntual del estado de acumulación de cetonas en el momento en que se obtuvo la muestra. El análisis de los cuerpos cetónicos en orina refleja una situación reciente de los cuerpos cetónicos en la sangre, pero no indica su situación en el mismo momento del análisis. El análisis de los cuerpos cetónicos en orina es mucho más frecuente que el análisis de cetonas en sangre. Puede realizarse aisladamente, junto con una glucosa en orina o como parte de un urianálisis. Los métodos para medirlas en la orina evalúan la presencia de acetoacetato aislado o junto con acetona, pero no suelen detectar el beta-hidroxibutirato.

Las cetonas en sangre se pueden medir en el laboratorio o con analizadores portátiles “a la cabecera del paciente” (POCT). El laboratorio emplea suero (la parte líquida de la sangre) para la determinación, que generalmente es de acetoacetato. Si se desea medir el beta-hidroxibutirato, debe solicitarse explícitamente.

Cuando se analiza sangre obtenida por punción con una lanceta en un dedo mediante un dispositivo POCT, se suele evaluar el beta-hidroxibutirato. Con los dispositivos portátiles, la prueba puede realizarse en la misma planta de hospitalización, en el servicio de urgencias, en la consulta médica o en el propio domicilio.

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Preguntas comunes

¿Cómo se utiliza?

El análisis de cetonas en sangre se emplea para el cribado, diagnóstico y seguimiento de una situación de riesgo vital conocida como cetoacidosis diabética en los pacientes con diabetes tipo 1 y a veces tipo 2. La cetoacidosis diabética se puede producir cuando la concentración de glucosa en sangre es muy elevada, durante una enfermedad intercurrente, infecciones graves, en el embarazo y en otras muchas situaciones.

A veces puede solicitarse la determinación de cetonas en sangre junto con otras pruebas como gases en sangre, glucosa y electrolitos, para detectar estados cetoacidóticos en las personas no diabéticas cuando existen signos o síntomas compatibles con cetoacidosis, por ejemplo, debidos al alcoholismo.

¿Cuándo se solicita?

El análisis de cetonas en sangre se solicita cuando una persona con diabetes presenta signos o síntomas asociados a cetoacidosis diabética. También puede solicitarse siempre que exista la sospecha de que se pueda desarrollar una cetoacidosis diabética, por ejemplo, en las personas diabéticas cuando enferman o durante el embarazo. Actualmente, los dispositivos POCT permiten la monitorización en el domicilio, por ello los cuerpos cetónicos pueden determinarse siempre que el médico lo considere indicado. Entre los signos y síntomas de una cetoacidosis se incluyen los siguientes:

• Aumento de la cantidad y frecuencia de la emisión de orina.
• Sed excesiva.
• Sequedad de piel, manos y pies fríos, sudoración.
• Deshidratación, pérdida de electrolitos.
• Aumento de la frecuencia respiratoria, disnea.
• Aliento con olor afrutado.
• Náuseas, vómitos.
• Cansancio.
• Confusión.
• Coma (a veces).

En las personas no diabéticas, las cetonas en sangre se solicitan si existen signos o síntomas asociados a cetosis o cetoacidosis, sobre todo si existen antecedentes de alcoholismo o ayuno prolongado.

¿Qué significa el resultado?

Si se detecta un aumento de la concentración de cetonas en sangre, se puede afirmar que la persona tiene algún grado de cetosis o de cetoacidosis.

Si la concentración de cetonas es normal o está disminuida, puede ser que no esté aumentada la producción de cetonas, o bien que el método empleado no sea capaz de detectar el cuerpo cetónico en concreto que está elevado.

¿En personas diabéticas puede medirse solo la glucosa en lugar de las cetonas o cuerpos cetónicos?

A pesar de que un aumento de la concentración de cetonas se asocia a concentraciones elevadas de glucosa, es cierto que pueden detectarse cetonas en sangre con glucosas moderadas en ciertas situaciones, como por ejemplo, cuando existen enfermedades intercurrentes.

¿Pueden determinarse las cetonas o cuerpos cetónicos en orina en lugar de medirlo en sangre?

Sí, a menudo se realiza el análisis en orina y no en sangre. No obstante, debido a que el método no detecta beta-hidroxibutirato, al médico le puede interesar más la determinación en sangre. El beta-hidroxibutirato es el cuerpo cetónico mayoritario en la cetoacidosis diabética.

¿Puede desarrollarse una cetoacidosis diabética si se tiene una diabetes tipo 2?

Sí se puede, aunque no es tan frecuente como en la diabetes tipo 1. En la diabetes tipo 2 puede desarrollarse una cetoacidosis, especialmente si existe una enfermedad o infección grave. También pueden desarrollarse cetosis y cetoacidosis en las personas no diabéticas, en los casos de alcoholismo, tras ayuno prolongado y en dietas ricas en grasas y pobres en hidratos de carbono (dieta “keto” o cetogénica). En ocasiones se provoca esta situación en los niños con epilepsia que tienen convulsiones frecuentes y no responden al tratamiento farmacológico.

¿Se puede desarrollar una cetosis o cetoacidosis sin saberlo?

Puede desarrollarse cierto grado de cetosis con pocos síntomas, aunque la acumulación de las cetonas desencadenará los signos y síntomas característicos, que serán más acusados a medida que aumente la concentración de cetonas.

¿Hay algo más que debería saber?

Recientemente, algunos estudios han demostrado que tanto la determinación de cetonas como la de beta-hidroxibutirato en suero, son eficaces para diagnosticar una cetoacidosis diabética. Algunos médicos prefieren solicitar la determinación de beta-hidroxibutirato. En la cetoacidosis diabética aguda, el cociente entre beta-hidroxibutirato y acetoacetato aumenta hasta más de 10 veces (se pasa de una relación 1:1 a una relación 10:1). Al administrar insulina, la concentración de beta-hidroxibutirato disminuye antes que la de acetoacetato. Sin embargo, la determinación de beta-hidroxibutirato no está disponible en todos los laboratorios.

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Enlaces

Pruebas relacionadas:

Gases en sangre

Glucosa

Urianálisis

Estados fisiológicos y enfermedades:

Diabetes

Acidosis y alcalosis

Epilepsia

En otras webs:

American Diabetes Association (ADA): ¿Qué es la diabetes?

Manual MSD: Cetoacidosis diabética

Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC): Cetoacidosis Diabética

Medline: Cetoacidosis diabética

MayoClinic: Cetoacidosis diabética

Magazine. Soluciones para la diabetes: Guía práctica de los cuerpos cetónicos‍