También conocido como: BRCA, genes 1 y 2 de susceptibilidad al cáncer de mama
Nombre sistemático: BRCA1 del cáncer de mama y BRCA 2 del cáncer de mama
Aspectos generales
¿Por qué hacer el análisis?
Para conocer el riesgo de desarrollar cáncer de mama o de ovario asociados a mutaciones hereditarias en los genes BRCA1 o BRCA2.
¿Cuándo hacer el análisis?
Cuando la historia clínica o familiar del paciente hace sospechar la presencia de una mutación en uno de los genes BRCA como, por ejemplo, cuando el paciente o algún familiar ha desarrollado un cáncer de ovario a cualquier edad o un cáncer de mama antes de los 50 años en mujeres y a cualquier edad en varones; cuando se ha identificado alguna mutación en los genes BRCA1 o BRCA2 en algún miembro de la familia.
¿Qué muestra se requiere?
La determinación se realiza a partir de una muestra de sangre venosa del brazo o a partir de un enjuague oral del que se pueden obtener células de la boca.
¿Es necesario algún tipo de preparación previa?
Para esta prueba no se necesita ninguna preparación especial. Sin embargo, es muy recomendable recibir asesoramiento genético para confirmar que se cumplen los criterios de sospecha. Si la muestra es de saliva, se recomienda no comer, beber ni masticar chicle al menos una hora antes de la prueba. Además, se deben evitar los besos justo antes de la prueba.
¿Qué es lo que se analiza?
BRCA1 y BRCA2 son dos genes supresores de tumores. Normalmente, estos genes ayudan a prevenir el cáncer produciendo proteínas que impiden una multiplicación excesiva de las células del cuerpo. Algunas alteraciones (mutaciones) de estos genes afectan a su función y pueden favorecer que las células se reproduzcan de manera descontrolada. Esta prueba detecta mutaciones en estos genes, relacionadas sobre todo con el cáncer hereditario de mama o de ovario.
Según la American Cancer Society (ACS), 225.000 mujeres son diagnosticadas de cáncer de mama invasivo y unas 20.000 de cáncer de ovario. Se estima que entre un 3% de los casos de cáncer de mama y un 10% de los casos de cáncer de ovario se deben a una mutación de los genes BRCA1 o BRCA2. Los hombres pueden también heredar el riesgo de desarrollar un cáncer de mama. Alrededor del 10% de los casos de cáncer de mama en varones está asociado a las mutaciones en estos genes.
Las mujeres con mutaciones hereditarias en BRCA1 o BRCA2 presentan un riesgo de hasta un 60% de desarrollar cáncer de mama en algún momento de su vida, y un 15-40% de desarrollar un cáncer de ovario. Además, el riesgo de desarrollar otros tipos de cáncer (como el cáncer de próstata o de páncreas) también está aumentado, tanto en varones como en mujeres. En las mujeres con mutaciones en alguno de estos genes, es frecuente que el cáncer de mama se desarrolle a una edad temprana, generalmente antes de la menopausia.
Las mutaciones BRCA se heredan de una generación a otra (patrón de herencia autosómico dominante). Cada persona tiene dos copias de cada uno de los genes BRCA1 y BRCA2, una copia heredada de cada progenitor. Las mutaciones pueden hallarse en una sola copia o en ambas copias de cualquiera de los genes. Para detectar las mutaciones de los genes BRCA se utiliza el ADN de cualquier célula del cuerpo. Las células de la sangre o de la boca son una fuente accesible para obtener y analizar este ADN.
Preguntas comunes
¿Cómo se utiliza?
Las pruebas rutinarias detectan las mutaciones conocidas en los genes BRCA1 y BRCA2 y que aumentan el riesgo de desarrollar cáncer de mama o de ovario. Si se ha identificado una mutación BRCA1 o BRCA2 en un familiar del paciente con cáncer de mama o de ovario, debe buscarse esa mutación en el resto de los familiares para establecer también su riesgo. Algunas mutaciones específicas en los genes BRCA1 y BRCA2 se asocian a determinados grupos étnicos como los judíos de ascendencia Ashkenazi.
En la población general se ha estimado una prevalencia de portadores del 0,11-0,32% para BRCA1 y 0,12-0,69% para BRCA2 (Reino Unido, Estados Unidos y Canadá). Por este motivo, no se recomienda el cribado general de la población.
El estudio de las mutaciones de los genes BRCA debe considerarse en aquellas personas que tienen antecedentes personales o familiares que sugieren la presencia de mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2. Existen una serie de herramientas de cribado para calcular el riesgo de tener una mutación en estos genes. Entre los factores de riesgo se encuentran:
- Cáncer en ambas mamas.
- Cáncer de mama diagnosticado a una edad temprana, antes de los 50 años.
- Cáncer de mama y de ovario diagnosticados en una misma paciente o antecedentes de ambos en la familia.
- Múltiples antecedentes familiares de cáncer de mama.
- Un único familiar con varios cánceres relacionados con las mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2.
- Cáncer de mama en un paciente varón o antecedentes de cáncer de mama en un familiar varón.
- Cáncer de mama “triple negativo” (receptores de estrógenos, progesterona y HER2 negativos).
- Ascendencia judía Ashkenazi.
Estos factores deberían tenerse en cuenta, tanto por la rama paterna como por la materna de la familia.
Es muy recomendable que las personas reciban asesoramiento genético por un especialista en genética del cáncer, tanto antes como después de la prueba BRCA, para comprender correctamente las implicaciones de un resultado positivo o negativo.
¿Cuándo se solicita?
No se recomienda realizar este estudio como cribado en la población general. La principal indicación de la prueba son los pacientes con historia personal o familiar de cáncer de mama o de ovario, o con algún familiar con una mutación conocida en BRCA1 o BRCA2. Si se desea hacerse la prueba, lo mejor es recibir el asesoramiento genético de un especialista.
¿Qué significa el resultado?
La presencia de mutaciones en BRCA1 o BRCA2 indica que la persona presenta un mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama o de ovario. También significa que los familiares del paciente pueden tener un riesgo aumentado de desarrollar estos tipos de cáncer. Sin embargo, en una misma familia con una mutación concreta de los genes BRCA no todos los miembros desarrollan cáncer, y éstos pueden aparecer en distintos momentos de su vida. La Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) estima que en las mujeres con mutaciones en BRCA1 el riesgo de desarrollar cáncer de mama es aproximadamente del 57-65%, siendo del 39-40% en el caso del cáncer de ovario. En cuanto a las pacientes con mutaciones en BRCA2, se estimó un 45-49% de probabilidad de desarrollar cáncer de mama a lo largo de la vida y de un 11-18% en el caso del cáncer de ovario.
¿Hay algo más que debería saber?
Es difícil cuantificar el riesgo que un resultado positivo confiere a una persona determinada. Los resultados deben interpretarse junto a la historia personal y familiar del individuo en cuestión. Un profesional especialista en asesoramiento genético podrá explicar mejor el significado de los resultados, así como las opciones de prevención para intentar disminuir el riesgo, además de gestionar la realización de los estudios en familiares.
La capacidad de estas pruebas de detectar mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2 no alcanza el 100%. Por lo tanto, incluso en el caso de un resultado negativo, existe una pequeña probabilidad de que exista una mutación en BRCA que no haya podido identificarse con el método empleado. Por otra parte, pueden existir mutaciones en otros genes que contribuyan al riesgo familiar de desarrollar cáncer. El estudio de los genes BRCA1 o BRCA2 solo detecta mutaciones en estos genes y por ello, si la mutación afecta a otro gen asociado también a mayor riesgo de cáncer de mama, la prueba de los genes BRCA1 o BRCA2 no la detectará.
Además, puede darse el caso de que la historia personal o familiar de cáncer sugiera un factor o una combinación de factores que contribuyan al riesgo individual de desarrollar cáncer. En estas familias, es probable que el riesgo de cáncer esté aumentado debido a una combinación de factores, como genes que ocasionalmente se asocian a cáncer (baja penetrancia) y factores asociados al ambiente o al estilo de vida que comparte la familia. A pesar de que el riesgo de cáncer que presentan estos individuos quede muy lejos del que presentan las personas con mutaciones de los genes BRCA1 o BRCA2, el riesgo será mayor que el de la población general, y por ello se recomienda una vigilancia más estricta.
Un resultado positivo para una mutación en los genes BRCA1 o BRCA2 tiene implicaciones, tanto para el paciente como para otros miembros de la familia. Por ello, suele surgir el dilema de cómo compartir dicha información con el resto de la familia. Un especialista en asesoramiento genético puede orientar al paciente sobre la forma de comunicar los resultados al resto de los familiares.
El asesoramiento, antes y después de la realización de la prueba, es imprescindible. Hay muchas situaciones a considerar cuando uno se prepara para una prueba genética así como a la hora de interpretar los resultados, y un especialista en genética tiene la formación y experiencia para aclarar y orientar cada caso.
¿Cuáles son las opciones ante un resultado del estudio genético de BRCA positivo?
Si el resultado de la prueba de BRCA es positivo, serán necesarios más controles y más pruebas de las habituales (mamografías, resonancia magnética, análisis de sangre para medir la concentración de CA-125 o CA 15-3, ecografía transvaginal), así como considerar alguna medicación que pueda reducir el riesgo (tamoxifeno), o incluso la extirpación quirúrgica de los ovarios o de las mamas. Existe un elevado número de variables a considerar y es importante conocerlas y comentarlas con el médico o con un especialista en asesoramiento genético.
¿Dónde se puede realizar esta prueba?
La prueba la solicita un médico, que puede ser el mismo que ofrecerá asesoramiento genético. La muestra de sangre se enviará a un laboratorio especializado en este tipo de pruebas.
¿Las personas con mutaciones en los genes BRCA tienen un riesgo aumentado de padecer otros tipos de cáncer aparte de la mama y el ovario?
El papel de las mutaciones de los genes BRCA en el desarrollo del cáncer aún se encuentra en investigación. Además del cáncer de mama o de ovario, estas mutaciones se han relacionado con el cáncer de próstata y de páncreas. En el año 2015 se estimó que un 0,5-4% de los pacientes con cáncer de próstata y un 5-8% de los pacientes con cáncer de páncreas tienen una mutación en alguno de estos genes.
Sin embargo, aún no se ha establecido con suficiente evidencia un método de cribado para estos tipos de cáncer. Por ejemplo, aunque se ha visto que los hombres con mutaciones en el gen BRCA tienen un riesgo aumentado de padecer cáncer de próstata, no se conoce los factores de riesgo personales o familiares que serían útiles para decidir si se debe realizar un estudio de los genes BRCA en los pacientes varones sin una mutación familiar conocida. La Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) recomienda realizar el cribado de carcinoma de próstata mediante tacto rectal y la determinación sérica del antígeno prostático específico (PSA) a partir de los 40 años. En el caso del cáncer de páncreas, no existe evidencia de que el cribado mediante el estudio de los genes BRCA mejore la supervivencia. Actualmente no existen guías clínicas sobre el estudio de los genes BRCA y el cáncer de páncreas.
Enlaces
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Estados fisiológicos y enfermedades:
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En otras webs:
Asociación Española Contra el Cáncer (AECC): Cáncer de mama
Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM): Cáncer de Mama y Ovario Hereditario
Instituto Nacional del Cáncer (NIH): Cáncer de seno (mama)-Versión para pacientes
Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC): Cáncer de mama
American Cancer Society (ACS): Cáncer de seno
MayoClinic: Cáncer de mama recurrente
Breastcancer.org: Screening and Testing
También conocido como: HSV-1, HSV-2, HHV1, HHV2, VHS, herpes oral, herpes labial, herpes genital
Nombre sistemático: virus del herpes simple tipo 1 y tipo 2
Aspectos generales
¿Por qué hacer el análisis?
Para hacer un cribado o un diagnóstico de la infección por el virus del herpes simple (VHS).